sábado, diciembre 20, 2014

¡¡ Adios a los tampones y compresas, pásate a FemmyCycle la nueva generación de copas menstruales!!



Hola chicas!!! ya tenemos la nueva  copa menstrual FemmyCycle, después de una prueba piloto y gracias a miles de usuarias que han dado sus comentarios y sugerencias, hemos podido trabajar junto a FemCap, para lograr un producto perfecto para nuestras usuarias.

Ahora, podemos decir que FemmyCycle es la nueva generación de copas menstruales, porque ha sido diseñada por ginecólogos vanguardista, para conseguir un producto perfecto que se adapte mejor a cada mujer.

Ahora FemmyCycle es más flexible,  gracias  a una ligera succión  previene que el cérvix quede colocado dentro de la copa. (al estirar esta succión se elimina a la hora de retirarlo), lo que también diferencia a FemmyCycle de otras copas menstruales, es que es anti-derrame, (aunque estés acostada, no tienes perdidas) tiene una máxima capacidad,  es totalmente liso, no tiene agujeros, ni pliegues, lo que lo hace más fácil a la hora de limpiar.


FemmyCycle viene en tres tamaños:


*FEMMYCYCLE PETITE- Capacidad 17.5 ml - Para mujeres que nunca han estado embarazadas

*FEMMYCYCLE REGULAR - Capacidad 30 ml - Para mujeres que han estado embarazadas


*FEMMYCYCLE CERVIX BAJO Capacidad 30 ml










¿Ya  sabes  que FemmyCycle se adapta mejor a ti? Si es así, ya puedes adquirirla en    Feminidad-Natural.com




domingo, agosto 31, 2014

QUÉ FACTORES AFECTAN A MI FERTILIDAD?



Este es un articulo muy interesante que leí, creo que es muy importante conocer de ciertos factores que pueden impedir a llegar a cumplir el deseo de ser padres!!!

Existen factores que afectan a la fertilidad y que pueden modificarse ante el deseo de ser padres. Se conoce que la obesidad o sobrepeso en la mujer influye en su capacidad reproductiva. Altera el ciclo menstrual, el desarrollo del óvulo, el endometrio dónde anida el embrión…
Actualmente se considera sobrepeso tener un índice de masa corporal (IMC) superior a 25. El índice de masa corporal se calcula dividiendo el peso entre tu talla al cuadrado, peso (kg) / talla (m2). Por cada unidad que    la mujer sobrepase el 29, se reducen las posibilidades de conseguir embarazo en el primer año en un 5%, comparable a aumentar en 1 año la edad de la mujer.
Tanto el sobrepeso como el bajo peso de la mujer está relacionado con tener abortos con más frecuencia que la población con peso normal. A las mujeres con un IMC superior a 29 kg/m2 se les debería informar del riesgo que conlleva para ellas el embarazo, siendo muy recomendable que perdieran peso, tanto para conseguir el embarazo más fácilmente, como para tener un embarazo más saludable.
La obesidad en el hombre se ha relacionado con menor deseo sexual, menor frecuencia de relaciones sexuales y disyunciones eréctiles.
El ejercicio físico  es positivo para la fertilidad hasta cierto punto. Pero es recomendable ejercicio de anciano, pero no se recomienda ejercicio intenso ya que puede alterar el ciclo.
Existen hábitos saludables relacionados con la dieta que también en algún estudio han demostrado beneficios  como ingerir mayor cantidad de ácidos grasos monoinsaturados frente a trans, disminuir los hidratos de carbono con alto índice glucémico, la dieta mediterránea… En la actualidad no existe aún evidencia científica para recomendar cambios dietéticos para mejorar la fertilidad pero no está de más seguir una dieta equilibrada e intentar mejora nuestros hábitos dietéticos.
Fumar también ha demostrado disminuir la fertilidad natural, tanto en mujeres como en hombres. Y también reduce las posibilidades de éxito de técnicas de reproducción asistida.
El consumo excesivo de alcohol también es perjudicial, en la mujer se altera el ciclo, disminuye la calidad embrionaria se altera la implantación… Y en el varón altera la calidad del semen, influye en la libido  y puede provocar alteraciones en la erección.
Si se consumen altas dosis de cafeína al día (más de 100mg al día, equivale a 5 tazas de café) se tiene más riesgo de abortos, resultados similares ocurren con el consumo de cocaína.

Con respecto a la influencia del estrés los estudios son controvertidos. Muchas parejas piensan que el estrés es el causante de su infertilidad, pero existen parejas que con altos niveles de estrés consiguen embarazo. Se basan en creencias y mitos, mejor en vacaciones, hay que relajarse… Pero estos datos no están contrastados en ningún estudio. Lo que se sabe es que en parejas con problemas de fertilidad el estrés  y la ansiedad afecta a las relaciones de pareja, disminuye la libido, la frecuencia de relaciones… Y también que el estrés es la principal causa de abandono de tratamientos de reproducción asistida. 
Así, lo más recomendable para una pareja que se está planteando la paternidad es seguir unos hábitos saludables, abandonar el tabaco, realizar ejercicio moderado, consumir alcohol y cafeína en cantidades mínimas (máximo 4 bebidas alcohólicas a la semana y 2 tazas de café al día) y eliminar radicalmente el consumo de drogas.

Así, lo más recomendable para una pareja que se está planteando la paternidad es seguir unos hábitos saludables, abandonar el tabaco, realizar ejercicio moderado, consumir alcohol y cafeína en cantidades mínimas (máximo 4 bebidas alcohólicas a la semana y 2 tazas de café al día) y eliminar radicalmente el consumo de drogas.



Algunos consejos para mejorar tu salud intima

Hola chicas!!!!

Aquí estamos otra vez,  deseamos mantener este espacio para ayudar a muchas mujeres a mejorar la vida intima y para una salud sexual plena!!!

La Organización Mundial de la Salud (OMS)define la salud sexual como un estado de "bienestar físico, emocional, mental y social" relacionado con la sexualidad. El instituto de Medicina Sexual (IMS) ofrece algunas recomendaciones

Vida sana: Lo primero de todo y más importante es seguir hábitos de vida saludables, cumpliendo "normas básicas" como seguir una dieta equilibrada, dormir 7-8 horas y practicar al menos 30 minutos diarios de ejercicio físico, lo que redundará positivamente en nuestra predisposición y capacidad sexual. 
La edad no importa: existe la falsa creencia de que las relaciones intimas lo practica sólo la gente joven y que los problemas de salud sexual son "cosas de la edad". Sin embargo, pueden existir  dificultades que se pueden presentar en cualquier momento impidiendo una salud intima plena.Tu pareja, el mejor confidente: el primer apoyo a la hora de poner solución a un problema de salud sexual se encuentra en la pareja. Juntos se pueden afrontar mejor. De hecho, en muchos casos el tratamiento de determinadas patologías incluye la participación de la pareja.
Los problemas deben consultarse: muchas dificultades permanecen años sin diagnosticar por el desconocimiento quién las sufre o por una actitud pasiva ante los síntomas. "Ya se me pasará", piensan muchos. Sin embargo, es fundamental la consulta con el especialista ante cualquier indicio ya que puede estar ligado a otros problemas de salud que han podido pasar desapercibidos.
No a la vergüenza: los problemas de salud sexual pueden tener causas tanto orgánicas como psicológicas, y en ocasiones existenciales, por lo que deben ser tratados del mismo modo que cualquier otra patología que afecte a la salud. 
Con diagnóstico, hay solución: un diagnóstico es la base para atacar la raíz del problema. Hoy en día existen tratamientos conductuales, sexológicos con y sin apoyos farmacológicos e incluso quirúrgicos, que ofrecen buenos resultados. Y desconfía de productos milagrosos recetados sin averiguar las causas de tus síntomas.
 Vida sexual activa: la ausencia de disfunción sexual no es suficiente para una salud sexual plena. Hay que cultivar el autoconocimiento del cuerpo, y la intimidad con la pareja. Y si es necesario buscar huecos en la agenda, anticipar o planificar esos encuentros con antelación, hazlo antes de que la rutina y el estrés empiecen a hacer mella.
 Sexo seguro, para evitar sustos para nuestra salud: entre las patologías más frecuentes relacionadas con la salud sexual se encuentran las enfermedades de transmisión sexual (ETS) que, en muchos casos, pu
eden evitarse llevando una vida sexual segura, respetando las medidas higiénicas y sólo manteniendo sexo sin protección en pareja monógama, cuando ambos hayan descartado sufrir alguna infección.